
Amaia Conde 💎 5⭐
Febrero, para mí es como si el año empezara, todo fluye e influye. El resultado del esfuerzo es fruto de la buena inversión ya sea de trabajo, tiempo o iniciativa. Cuando las estrellas se alinean todo cambia para bien o para mal, que agradecidos somos cuando es para bien.
En un momento de estar chacoteando en un canal de reseñas y sugerencias en su mayoría excelentes hablaban de una chica que siempre me llamó la atención, muy guapa, cuerpo delgado, pero súper rico rostro, hermoso, para mi gusto muy particular, y con una percepción bastante inteligente ( opina poco, pero dice mucho ).
Total que hago un comentario de su agenda ( siempre saturada, la niña es un éxito ) Me responde al poco tiempo, lo más lindo, me envía su información para agendar, no podía creer que fuera tan empatica. Por supuesto agendo y envío mi anticipo para cuadrar el encuentro, SOMOS HOMBRES NO PAYASOS.
Quedamos de vernos un día antes de dar su último servicio ( regresa a su patria y tardará solo un poco para regresar a México ). Llegó el día esperado y le escribo por la mañana para confirmar. Aviso por su canal que ya estaba llena su agenda, lógico. Me responde un poco después que claro que nos veíamos, de las pocas chicas que tiene una palabra inamovible. Llego al hotel con la rigurosa faena de aseo.
Posteriormente me llaman el tan esperado cuántos hay en la habitación, una señorita solicita acceso, el nervio de poder conocerla. Tocan y aparece una chica delgada con pronunciaciones de busto y caderas riquísimas. Con un beso se dispone a pasar, una breve charla por demás amena.
Me empieza a platicar, también a besar delicadamente pero sin dejar de manosearme. Es una delicia el pre con ella, nos disponemos a comenzar, pero ella se cambia de lencería. Abrimos una botella de vino de uva primitivo ( italiano de la región de puglia, un vino meloso, con carácter herbal con percepciones mentoladas, si bien goloso también estructurado, digno comparativo con ella.
Continuamos con una sesión de besos bien dados, cachondeo lento, disfrutando de un plato sabroso, lleno de matices, que son dignos de paladares exigentes pero con la sutileza de asombrar a paladares revolucionados. Me dispongo a darle un oral, lento provocador, minucioso. Es una satisfacción ver como se contusionan y lubrican al paso de las humedades provocadas.